Umberto Eco: "Internet es una parodia de la enciclopedia porque también incluye información falsa"

Investidura de Umberto Eco
Universidad de Sevilla
Actualizado: miércoles, 17 febrero 2010 18:56

SEVILLA, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

El filósofo y escritor italiano Umberto Eco, quien fue investido hoy doctor honoris causa por la Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla, afirmó que Internet es una "especie de parodia de la enciclopedia que reúne todo el saber del mundo, porque incluye también información falsa", por lo que consideró que el medio ha "fracasado en su intento por ordenar el conocimiento del mundo disponible".

Así, Eco, quien ha sido investido honoris causa por 38 universidades del mundo hasta la fecha, señaló que la función de la cultura "no es sólo conservar cosas, sino, también, saber desecharlas, indicando, en este sentido, que una biblioteca es la imagen representativa de una cultura "no sólo por los libros que tiene, sino también por los libros que no ha querido tener".

No obstante, el semiótico italiano, quien fue precedido en su discurso de investidura por la laudatio del catedrático de Literatura y Comunicación de la Universidad de Sevilla Manuel Ángel Vázquez Medel, rechazó la idea de introducir pautas de control en el universo de internet, ya que, según aseguró, "el más mínimo criterio supondría la reducción de libertad", por lo que se mostró partidario de "educar a la gente a utilizar críticamente la libertad".

Asimismo, el autor de la novela 'El nombre de la rosa' aludió durante su discurso, pronunciado en italiano, al "sueño de toda filosofía y de toda ciencia por conocer y definir las cosas por su esencia", aspiración que ilustró haciendo un recorrido por las diferentes herramientas que ha utilizado el ser humano por realizar un compendio del conocimiento existente, entre ellas, la enciclopedia durante el Barroco.

De este modo, recordó que fue con Francis Bacon con quien se abrió camino a la idea de una enciclopedia basada en datos derivados de la experiencia científica y sobre una crítica de las falsas opiniones del pasado, como un repertorio "abierto y en continuo desarrollo", para referirse después a Emanuele Tesauro y su 'Índice Categórico', donde éste propone el modelo de metáfora como forma de descubrir relaciones todavía inéditas entre los datos del saber.

No obstante, para Eco el proyecto más "completo y articulado" en este sentido es del Wilkins, quien en 'An essay torrad a real carácter andad a philosophical language' elabora una "colosal" reseña del saber y establece una tabla de 40 géneros mayores para después subdividirlos en 251 diferencias peculiares y derivar de ellas 2030 especies.

Destacó el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades las relaciones entre la enciclopedia barroca y la World Wide Web, indicando que el WWW no es un sistema ordenado de géneros y especies, sino una lista "infinita e indefinida" de fenómenos, definiciones, descripciones o propiedades.

"La web es incapaz de reducir al orden su propia multiplicidad ni nos ofrece instrumentos para crear desde su caos un orden posible", afirmó, reconociendo, sin embargo, que "cualquier orden posible de nuestros conocimientos tendrá que ser elaborado usando la enciclopedia infinita de la web, pero sin sucumbir al vértigo de su laberinto".

"EL LIBRO ES LA MÁXIMA GARANTÍA DE CONSERVACIÓN"

También se refirió Eco en un encuentro con los medios posterior a la ceremonia de investidura a la crisis que sufre el periodismo desde que la televisión comenzó su andadura, ya que "la televisión cuenta a las 20,00 horas lo que el periódico sólo pueda hacer al día siguiente", algo que, según dijo, la prensa ha intentado superar "ofreciendo no sólo la noticia, sino una explicación de la misma y convirtiéndose, en algunos casos, en una publicación semanal.

Además, afirmó que los jóvenes ya no leen el periódico, sino que acuden a internet y consideró el fenómeno de la aparición de la prensa gratuita, señalando que éstas publicaciones ofrecen en su primera página "todas las noticias de orden internacional que nos pueden servir". No obstante, aseguró que la prensa "no va a morir mañana" y que durarán "mientras los viejos los lean".

Respecto al libro electrónico y su posible influencia en la desaparición del libro tradicional, el escritor defendió que éste último es el "mejor modo de transmitir información. "El libro de papel es como una cuchara o un cuchillo, una vez inventado ya no se puede prescindir de ellos", destacó.

Consideró, asimismo, que no existe "ninguna garantía" de que los a artilugios informáticos puedan conservar siempre la información que almacenan, mientras que los libros son la "única garantía de conservación que existe en estos momentos".

ECO: EL "ÚLTIMO GRAN HUMANISTA"

Por su parte, Manuel Ángel Vázquez Medel, se refirió al nuevo doctor honoris causa de la Hispalense como el "último de los grandes humanistas".

El catedrático destacó que Eco representa el "paradigma del auténtico intelectual" de nuestros días: experto en el pensamiento clásico y en el medievo, conocido semiólogo y comunicólogo, autor de textos teóricos y de análisis y, a la vez, escritor de ficciones que ha alcanzado un "importante lugar en la industria cultural y una notable influencia en la sociedad".

También resaltó del perfil del italiano su "pasión por la semiótica, por la literatura sin límites y sin fronteras, por la comunicación y por la Universidad", todas ellas fundadas en una ética y una estética, así como en una poética y una política concreta vinculadas con la defensa de constante de una "verdadera democracia basada en la libertad, la justicia social y la solidaridad".

Por último, el rector de la Universidad de Sevilla, Joaquín Luque, de manos de quien Eco recibió la medalla, el libro de la Ciencia, el birrete laureado, el anillo y los guantes propios del acto de investidura, resaltó del escritor que su conocimiento del mundo, pasado y presente, así como su capacidad para analizarlo es "auténticamente universal".

Luque mostró su admiración por el "vigor intelectual y por la fina ironía" de Eco, pero también por su "amor por la filosofía que nos mantiene en duda y nos aleja de respuestas absolutas, enseñándonos que la verdadera sabiduría no es destruir ídolos, sino no crearlos nunca".

Asimismo, resaltó el hecho de que el italiano "invita siempre a enamorarnos de los libros" y confesó, en este sentido, un sueño en el que en Sevilla, ciudad de "luces y apagones donde se paralizan bibliotecas porque algunos no la valoran como bien público aterrizaban los personajes protagonistas de 'El nombre de la rosa'. Guillermo de Baskerville y Adso de Melk, para desentrañar la resistencia al futuro por parte de una sociedad".

Luque afirmó no tener ninguna dificultad en calificar de "auténtico sabio" al nuevo compañero de Claustro, un "divertido sabio que además está jugando en Italia un papel decisivo para defender el derecho ciudadano a la libre información, frente a brotes totalitarios que empiezan a surgir desde el poder político y económico".