Los académicos de los Oscar premian al cine tradicional y se olvidan de las nuevas tecnologías

FOX
Actualizado: lunes, 8 marzo 2010 13:07


MADRID, 8 Mar. (Portaltic/EP) -

Las nuevas tecnologías no han podido con la artesanía a la hora de hacer cine durante la 82ª gala de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas celebrada la pasada madrugada en el ya tradicional Kodak Theatre de los Ángeles. Los premios concedidos por la todopoderosa industria del cine estadounidense, los Oscars, han sido recogidos por manos más acostumbradas al montaje con tijera que a las modernas técnicas de filmación en tres dimensiones.

Más allá del morbo sentimental entre James Cameron, dueño y señor de la taquilla, contra su ex esposa, Kathryn Bigelow, primera mujer merecedora del galardón a mejor dirección, la batalla también se libraba en otros frentes, el cine tradicional contra las últimas tecnologías en filmación, los escenarios construidos contra la pantalla verde.

Fuera de las categorías a mejor dirección y mejor película, ningún film que viva de los efectos especiales había conseguido introducir ningún candidato en las categorías interpretativas. Tan sólo 'Up' y 'District 9' se colaron en los mejores libretos, cada uno en su categoría --original y adaptado, respectivamente--, aunque ninguno de ellos resultó ganador: en estos apartados, 'En tierra hostil' y 'Precious' se llevaron al 'tío' Oscar a casa.

Asimismo, 'Avatar', que el propio Cameron calificó de "película no candidata" a las grandes categorías, ha sido vencida también en las llamadas categorías técnicas, donde las grandes superproducciones de ciencia ficción suelen hacer el agosto.

Los Na'vi de Cameron sólo consiguieron tres estatuillas de las ocho a las que optaba, efectos especiales, dirección artística y fotografía --esta última, un 'gracias' en toda regla de la industria por el enorme regalo que a nivel económico Cameron les ha hecho con las tres dimensiones--.

El resto de categorías técnicas como sonido, edición de sonido y montaje fueron a parar a las arcas del equipo de Bigelow, que quitaba literalmente de las manos el Oscar a Cameron, nominado también como montador.

'UP' SALVA LOS MUEBLES

Si se puede extraer una vencedora dentro de las películas que utilizan las últimas técnicas tecnológicas para contar su historia, esa es 'Up'. La película de Pixar firmada por Pete Docter y Bob Peterson, había también conseguido colarse entre las candidatas a mejor película.

Las aventuras de un anciano y un joven 'boy scout' se convirtió así en la segunda película de animación que optaba a este premio tras 'La bella y la bestia' de la factoría Disney, que no pudo en el año 1992 con el thriller de Jonatham Demme 'El silencio de los corderos'.

Las facultades de 'Up' han sido, según la crítica, que a pesar de contar con las últimas técnicas de animación 3-D, ha logrado narrar una historia con un estilo cinematográfico clásico.

Los primeros minutos de la cinta que resume la vida de su protagonista, Carl Fredricksen, han sido alabados en multitud de tribunas. Y, a pesar de no haber tenido opción alguna, como a la postre se ha visto, en la categoría a mejor película la Academia no ha tenido dudas a la hora de nombrarla mejor cinta de animación del año.

En la categoría de películas de animación 'Up' competía con tres cintas de animación más tradicional y otra que sí utilizaba las tres dimensiones. Mientras que 'Coraline', el gótico cuento infantil surgido de la pluma de Neil Gaiman, apostaba por 3-D, las otras tres candidatas optaban por técnicas tradicionales.

'The fantastic Mr. Fox', la visión de Wes Anderson de la novela de Roald Dahl, empleó una técnica fuera de lo común estos días, el 'stop-motion' que recuerda más a otras piezas de animación como 'Wallace & Gromit' o a efectos especiales de otra época, con aroma a Ray Harryhausen.

Los estudios Disney no innovaron en su revisión afroamericana del cuento de la princesa y el sapo con 'Tiana y el sapo' y la quinta en discordia fue 'The Secret of Kells' cinta irlandesa de Tomm Moore que seguía también la escuela del lápiz antes que la del ratón.

STEVE JOBS, PRESENTE EN LA GALA

Por otra parte, la gala también contó con una representación del mundo tecnológico. El fundador de Apple, Steve Jobs, que durante años fue CEO de Pixar, también se vistió de gala para pisar la alfombra roja del Kodak Theatre.

Jobs, que compró la compañía a George Lucas en 1986 por 5 millones de dólares y en 2006 completó la venta de la misma a Disney por 7.400 millones de dólares, se dejó ver en Los Ángeles, quizá para apadrinar el primer anuncio en televisión de su nuevo invento iPad, o bien para ver los progresos del que un día fue su vástago.

Y es que uno de los protagonistas de los anuncios de la gala --que aunque no tienen el mismo impacto que los comerciales de la 'Superbowl' también son importantes-- fue iPad. El llamado "tercer dispositivo" por Jobs anunció el pasado viernes su fecha de lanzamiento: el 3 de abril verá la luz en Estados Unidos y a finales del mismo mes en España.